Concacaf: México remonta en Jamaica y se reengancha a Qatar 2022 - AS México

“Don’t worry about a thing / ‘Cause every little thing / Gonna be all right”. El espíritu de Cuauhtémoc Blanco y las estrofas de Bob Marley se conjugaron en Kingston en un partido de estrés y neurosis, poco usual en la ciudad de la distensión., congelados hace dos meses en los glaciares de Canadá y, ahora, casi ahogados en las truculentas aguas del Caribe. Al final, todo estuvo bien, tal como lo vaticinó Bob.

Pese a la prematura caída de Jorge Sánchez, quien no podrá achacar la desventura al césped del Independence Park, ‘El Tri’ se apropió de la guitarra y el ritmo. Vega y Rodriguez, paladines del bronce olímpico, encontraron vastas playas en los dominios de Brown y Williams. Y entonces, como venida del cielo, una pelota cayó a botepronto en el pie derecho de Alexis; el siempre diligente Blake imitó al célebre colibrí patirrojo para aletear el peligro.

Mientras Antuna seguía quemando a Lawrence, la Selección llenaba de avisos a Blake. Ninguno lo suficientemente amenazante. Las galopadas de Antonio y Walker, no obstante, advirtieron que el plan de Martino, sólido en práctica, tenía una falencia teórica: sin Edson Álvarez como dique ‘El Tri’ estaba en expuesto a una inundación. Bastaba uno de esos usuales chaparrones caribeños. Blake contuvo hasta el fuego amigo de Pinnock mientras la desnaturalizada noche de Kingston, sin reggae ni hierba al vuelo, se perdía en un catálogo de buenas intenciones. Lo que hubo al final del primer tiempo no fue precisamente reggae sino, más bien, heavy metal; primero, Antonio retó a Ochoa, pero Moreno acudió al rescate con pies de extintor; después, . Las rezongas de Martino y la eficiencia del VAR y obraron justicia. La anterior carga de Brown contra Funes Mori quedó archivada por falta de