Ayton y las dudas de los Suns
La revolución de los Mavericks sigue levantando ampollas en la NBA. Especialmente entre las víctimas que han ido dejando por el camino a unas finales de Conferencia que han disputado por primera vez desde 2011., ahora son los Suns los que están inmersos en su pelea particular. Algo que es más que normal si tenemos en cuenta que la entidad de Arizona optaba al anillo, llegó a las 64 victorias en regular season y se hundió estrepitosamente en segunda ronda ante los Mavs, con los que tuvieron ventajas de 2-0 y 3-2 antes de caer en casa, .
Uno de los jugadores que está en el ojo del huracán tras la derrota es DeAndre Ayton. Y eso que hay varios señalados: que no estuvo a la altura, y un Monty Williams que tomó muy pocas decisiones correctas en unos playoffs en los que los recursos y la capacidad de reacción es clave en un buen entrenador. Sin embargo, el pívot ha sido utilizado como chivo expiatorio y los problemas que tiene con su entrenador y con la organización se han filtrado tras una derrota que ha sido tildada de histórica.
Ayton ha promediado 15,7 puntos y 8,1 rebotes en la serie ante los Mavericks. Tras llegar a más de 17 tantos y 10 rebotes en temporada regular, la situación del center ha cambiado en playoffs: su protagonismo se ha reducido considerablemente, ha tenido fases de una marcada indolencia y, aunque no fue el problema en semifinales de Conferencia, tampoco ha sido la solución. No ha sido capaz de responder a las amenazas exteriores constantes de los Mavs ni a los triples de Maxi Klebber, un pívot que juega más tiempo detrás de la línea de tres que en la zona. Y su capacidad de intimidación ha sido muy cuestionada, sin ser útil a la hora de proteger su posición, defender el rebote o poner tapones (solo tres


