Alcaraz es un cohete

Carlos Alcaraz se clasificó brillantemente para la final del Miami Open, la primera de su carrera en un Masters 1.000, tras (). Antes del resultado del encuentro de la noche del viernes, la temporada de Carlos ya era sensacional, muy por encima de lo que él mismo esperaba cuando dijo esto después de ganar el torneo de Maestros de las NextGen en Milán el pasado mes de noviembre: «Las próximas ATP Finals son un objetivo muy chulo, muy difícil, diría que casi imposible, pero lucharemos y trabajaremos para poder lograrlo».

Cinco meses después es tercero en la carrera (ver tabla), lo que quiere decir que sólo dos jugadores han sido mejor que él, en cuanto a puntos sumados, en los tres primeros meses del curso. Hay otros aspectos en los que destaca por encima de casi todos, como el porcentaje de victorias. El murciano acredita un 89,5% con un balance de 17-2 y sólo lo supera Rafa Nadal (95,2% con su 20-1). No ha perdido con ningún jugador que no sea top-10 del ranking, ya que los dos que le han vencido, Berrettini en la tercera ronda del Open Australia y Nadal en las semifinales de Indian Wells, eran en ese momento 7º y 4º del mundo, respectivamente. Alcaraz ha disputado cuatro torneos y ganado un título (Río de Janeiro). Suma 1.550 puntos.

En la clasificación mundial, Charly es virtualmente 12º y sería 11º si el domingo (19:00, #Vamos) levanta el trofeo. En el mejor de los casos se quedaría a sólo 29 puntos del top-10, en cuya frontera estaría desde el lunes el británico Cameron Norrie. En caso de que se produjera ese gran triunfo en Miami, Alcaraz subiría al segundo puesto en la carrera, por detrás de Nadal.

Los números provocan que el impacto de la figura de la perla del tenis español sea muy grande, pero lo que realmente