Abrines desatasca al Barça

FINALIZADO

Quizás el Barça-Burgos era un partido incómodo para los azulgranas, un compromiso antes del duelo decisivo contra el Bayern, pero por el estado mental y anímico de los de Jasikevicius podía convertirse en un problema. Y así lo fue durante 20 minutos, cuando el Barça pareció seguir inmerso en la pájara de Munich, incapaz de anotar tiros sencillos y de sobreponerse a su rival. Pero el Barça se reactivó tras el descanso, apareció Abrines, y acabó ganando sin problemas. Burgos vivió del desacierto azulgrana y murió acribillado a triples, incapaz de igualar el juego culé en la segunda parte. Una derrota que por previsible no duele menos, pues la situación en la tabla de los burgaleses es más que complicada. Todo lo contrario que en Barcelona, donde ganar fue la mejor terapia para recuperarse del palo de Munich.

El quinteto poco ortodoxo del Barça, con algunos de los menos habituales, no funcionó. Pero no tanto por los nombres, sino porque los azulgranas arrastraron en el inicio contra Hereda San Pablo Burgos los mismos problemas que en el último partido en Munich: desacierto en el tiro exterior, problemas para resolver los ataques posicionales, mala circulación de balón… Uno de nueve en tiros de campo y cinco pérdidas en tan solo cinco minutos. Y claro, empezaron por detrás en el marcador.

Pero es evidente que Burgos no tiene el potencial del Bayern y rápidamente perdió la ventaja. Sus porcentajes fueron aún peores que los del Barça y todavía perdieron más balones. De nada les sirvió controlar el rebote, pues no acertaron tampoco en las segundas jugadas. Con el Barça por delante (13-7), evitaron sin embargo que se marcharan en el marcador.

El juego interior del Barça, además, fue muy pobre. Sin Mirotic, tuvo descanso