Pioli: "Quiero que Brahim se quede. Theo es increíble"
Tras casi 20 años entrenando, Stefano Pioli ya logró el premio que merecía. Cogió a un Milan undécimo y rechazando etiquetas, sin sentirse nunca el entrenador de moda. El scudetto aparecerá en las camisetas rossonere (y en su piel: ya se lo ha tatuado) gracias a su trabajo, silencioso y humilde. Por algo los tifosi le cantan «Pioli is on fire».


