encaraba con dudas. «No llego como me gustaría», dijo en Madrid antes de viajar el miércoles pasado a París. Metida en ambiente y en las rutinas de un campeonato de tamaña importancia, fue recuperando la confianza () hasta presentarse este martes en una Philippe Chatrier un tanto desangelada (jugaban a la misma hora otros dos franceses en la Lenglen y la Mathieu) para deshacerse con una contundencia tremenda de una jugadora local, Fiona Ferro (25 años y 130ª), que demostró una falta de forma y de tenis considerable, y no fue capaz de meterse en ningún momento en el partido, ante el torbellino que fue la española. Apenas 54 minutos después del inicio del duelo, Badosa había ganado por 6-2 y 6-0 tras ceder 23 puntos, sólo dos en el segundo set. El jueves se enfrentará en segunda ronda a la eslovena Juvan, que pudo con la rusa de la previa Selekhmeteva (7-5 y 7-6 (4)).