Lewis Hamilton planteó a su equipo abandonar después de la primera vuelta, cuando marchaba último, para ahorrar kilómetros al motor de su Mercedes en unas condiciones extremas de calor. Su equipo le recordó que podían luchar por puntos, de hecho, terminó la carrera quinto, no tan lejos del podio de su compañero, George Russell. El inglés, tras bajarse del coche: «Estoy muy contento, hubiera preferido una carrera más tranquila porque estaba a treinta segundos del penúltimo y recordé lo de Yeda, cuando no podía llegar al top-10, pensaba que era imposible llegar a los puntos. El equipo me dijo que podía ser octavo, yo no lo entendía, eran bastante optimistas, pero decidí darlo todo. Fue una pena que al final hubiera que cuidar el motor».